lunes, 27 de septiembre de 2010


-Nunca mentir


-Informar cuando el enfermo lo solicite


-Buscar un ambiente adecuado, sin interrupciones


-Evitar los tecnicismos


-Respetar el posible deseo del paciente de no conocer la verdad


-Evitar ser demasiado taxativos y dejar siempre una puerta abierta a la esperanza


(...)


Son algunas de las recomendaciones expuestas en el protocolo elaborado por la Organización Médica Colegial (OMC), presentado este lunes en Madrid.


La necesidad de publicar un protocolo de este tipo es un ejemplo del déficit formativo que por desgracia sufren los profesionales sanitarios en este ámbito. Bueno sería que los programas de estudio de los licenciados en Medicina incluyesen mayor esfuerzo en la atención psicológica al paciente. Y en este caso hablamos de algo más relacionado con el modo de gestionar el la práctica esa atención. Probablemente no solo en el modo de dar malas noticias debería ayudarse a formar a los profesionales sanitarios sino, de un modo más amplio, en el desarrollo de habilidades comunicativas en este contexto.

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